Las autoridades brasileñas decidieron suspender la necesidad de identificación biométrica en las elecciones municipales de este año para reducir el riesgo de contaminación por Covid-19.
La decisión fue anunciada por el presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE), Luis Roberto Barroso, tras una reunión con especialistas de dos importantes hospitales brasileños y una fundación local enfocada en la investigación médica.
Prohibir el uso de la identificación dactilar en las elecciones de 2020 es parte de un trabajo de consultoría pro bono que los hospitales Sírio Libanês y Albert Einstein y la Fundação Fiocruz están realizando en alianza con las autoridades electorales brasileñas. Los expertos están trabajando en un protocolo para reducir el riesgo de Covid-19 durante las elecciones, previstas para noviembre. El voto es obligatorio en Brasil.
Los especialistas concluyeron que la higienización de los lectores de huellas dactilares después de cada uso no sería viable. Los expertos también consideraron que el proceso de identificación biométrica a veces puede llevar más tiempo que las firmas tradicionales, por lo que el riesgo potencial de aglomeraciones fue otro factor que se consideró en la decisión.
El TSE había estado recopilando datos biométricos de los ciudadanos desde 2008 como un medio para prevenir el fraude electoral. Posteriormente, el objetivo evolucionó hacia la creación de una base de datos única de ciudadanos y una tarjeta de identificación unificada, que en última instancia recopilará información como registros de impuestos, conductores y votantes. TSE es responsable de liderar los esfuerzos de la base de datos biométrica única.
Hasta el momento se ha recopilado información de más de 119 millones de brasileños y las autoridades planean tener las huellas dactilares de 150 millones de ciudadanos para 2022.
Brasil introdujo el voto electrónico en 1996 como un medio para garantizar la confidencialidad y la precisión del proceso electoral, así como la rapidez. El equipo y el sistema de votación actualmente en funcionamiento pueden entregar resultados en cuestión de minutos dentro del cierre de las papeletas.
Sin embargo, la configuración del voto electrónico ha estado en el centro de la controversia sobre el fraude de software a gran escala y otras manipulaciones no técnicas durante años. Las autoridades locales han reiterado continuamente que el sistema es seguro.